Año Rosa
Ya estamos dispuestos, aquí, con fuerza, a comenzar el año, primer artículo, sin propósitos firmes para intentar cumplir los no firmes, jeje. No me entiendo ni yo mismo como quedó claro en mi último artículo del año así que mejor darle al punto frívolo.
En fin de año tuve un ingreso extra, por llamarlo de una manera fría, consistente en unos euracos que me regaló mi abuela así que qué mejor que invertirlos, es prácticamente obligatorio porque, claro, lo que mi abuela quiere es que me compre algo con ese dinero para que se convierta en un regalo acorde a mis gustos.
¿Y qué se me ha metido ahora entre ceja y ceja? (y mira que es difícil que se me meta algo entre ceja y ceja). Pues lo que veis en la preciosa y descriptiva fotografía, sí, unas zapatillas Converse de toda la vida en ese discreto color. Aunque eso sí, creo que el color oficial de las mismas es algo más discreto, vamos, algo más rosa niña, pero no sé, me parecen geniales y ya me veo lo bien que me tienen que quedar con unos vaqueros.
Así que esta semana, que tengo turno por lo menos tres días de 10 a 7 aprovecharé los finales de las tardes para mirar un par de zapaterías, comparar precios e ir a por ellas. Sí, la semana que viene son las rebajas pero como tenga el producto y el dinero en mis manos no sé si me voy a poder contener. Me podría denominar comprador compulsivo pero las zapatillas me las voy a poner hasta hartarme, vamos, que compro y uso así que no cumplo los dictámenes de un consumista en toda regla.
No sé, no se me ocurre mejor forma de comenzar el año que mirando las cosas de color de rosa, como mi corbata para la cercana bodissima, fucsia hasta rabiar.
Besotes mil
En fin de año tuve un ingreso extra, por llamarlo de una manera fría, consistente en unos euracos que me regaló mi abuela así que qué mejor que invertirlos, es prácticamente obligatorio porque, claro, lo que mi abuela quiere es que me compre algo con ese dinero para que se convierta en un regalo acorde a mis gustos.
¿Y qué se me ha metido ahora entre ceja y ceja? (y mira que es difícil que se me meta algo entre ceja y ceja). Pues lo que veis en la preciosa y descriptiva fotografía, sí, unas zapatillas Converse de toda la vida en ese discreto color. Aunque eso sí, creo que el color oficial de las mismas es algo más discreto, vamos, algo más rosa niña, pero no sé, me parecen geniales y ya me veo lo bien que me tienen que quedar con unos vaqueros.
Así que esta semana, que tengo turno por lo menos tres días de 10 a 7 aprovecharé los finales de las tardes para mirar un par de zapaterías, comparar precios e ir a por ellas. Sí, la semana que viene son las rebajas pero como tenga el producto y el dinero en mis manos no sé si me voy a poder contener. Me podría denominar comprador compulsivo pero las zapatillas me las voy a poner hasta hartarme, vamos, que compro y uso así que no cumplo los dictámenes de un consumista en toda regla.
No sé, no se me ocurre mejor forma de comenzar el año que mirando las cosas de color de rosa, como mi corbata para la cercana bodissima, fucsia hasta rabiar.
Besotes mil
5 comentarios
Joserra -
Date una vuelta por la Mañueta que seguro que algo encuentras
ace76 -
Yo tengo que comprarme unos zapatos, a ver si mañana por la mañana me doy una vuelta por el centro.
Inakov -
Inakov -
Su -