He vuelto
Sí, he vuelto. ¿Y a dónde? preguntarán algunos, pues al gimnasio. Sí señores, desde la semana pasada mi cuerpo ha vuelto a experimentar el traqueteo de la bicicleta o el sube y baja de esa misteriosa máquina que algunos llaman la "elíptica".
Y es que mi curva de la felicidad está empezando a parecer de la felicidad, de la carcajada y de la multi risa porque vamos, cualquier día ya me veo entrando en alguna calle de Chueca (claro, el comienzo de chueca no es el mismo, por ejemplo, para un madrileño de toda la vida que para un agente inmobiliario) y pasando por unos escaner de esos de checkpoint y la cosa pitando en plan: piiii, piiii, osea tía, piiii, piiii, osea tía que con esa barriga no pasas. Y entonces una flecha señalaría hacía otra entrada en la que pondría osos. Pero claro, yo quiero una tercera entrada, en la que no ponga nada, peo... parece que no hay, ah, sí, es una que tiene puertas de armario.
Bueno, a lo que iba, que he vuelto al gimnasio, ahora estoy de mañana así que está lleno de señores de estos de mepasotodoeltiempobufandomientrashagoejercicioyluegomerebozoelcuerpodecremahidratanteenelvestuario. y de grupos de estas señoras hiper pijas de nohagolastareasdelhogarporquetengocriadaymimaridotrabajaparamiasiquemevoyalgimnasioaandarenlacinta.
Aunque no sé que digo porque yo también me paso todo el rato andando en la cinta, vamos, que lo de correr como que lo dejo más adelante. Y las pesas, ¡cómo me miraron cuando entré!, sobre todo las de plástico, que son amigas íntimas mías. Las de metal lloraron incluso, y había que oir cómo caían sus lagrimones al suelo: cloncccc, cloncccc...´
Pues sí, que mis dolores misteriosos se tendrán que enfrentar al ejercicio. A ver si voy a tener una lesión interna del quince y la estoy jodiendo más... prefiero no pensar en ello.
Os contaré mis progresos
Besotes mil
P.D.: Si alguien se pregunta si ha desaparecido un artículo de mi blog, sí, ha desaparecido.
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ace76 -